Uno de los grandes inventos en la historia de la humanidad, la refrigeración se está llevando a los mercados rurales de pescado y productos agrícolas en Nigeria a través de la invención de un empresario de cámaras frigoríficas con acceso 100% solar.
Nnaemeka C. Ikegwuonu ha recibido premios por sus pioneros ColdHubs, que utilizan tecnología transformadora que, como todas las grandes innovaciones, aborda varios problemas a la vez.
Alrededor de 6.000 toneladas de pescado se pescan todos los días en el lado rural de Nigeria del delta del Níger, pero debido al clima tropical sólo se venden 2.000 toneladas de pescado fresco. La historia es la misma para las frutas y verduras, que en promedio pueden sobrevivir un máximo de sólo dos días en el calor y la humedad de la nación de África Occidental.
Diseñado específicamente para áreas fuera de la red, ColdHubs emplea paneles solares en la azotea para generar suficiente electricidad para alimentar las unidades en todas las condiciones climáticas, al tiempo que proporciona refrigeración autónoma confiable 24/7. Esto reduce el deterioro, pero también genera ganancias mucho mayores.
En teoría, una bolsa de bonga fresco debería costar entre $ 20 y $ 40, pero sin instalaciones de almacenamiento, los pescadores venden la misma bolsa por mucho menos para evitar que se eche a perder, o ahuman o secan el pescado y lo venden días después, mientras aceptan mucho menos debido al mayor valor y demanda que requiere el pescado fresco.
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ColdHubs atiende actualmente a 3.517 agricultores y pescadores. Hasta ahora, la compañía ha instalado 24 Hubs, ahorrando más de 20.000 toneladas de alimentos del deterioro y empleando a 48 mujeres para reparar los refrigeradores. Con un costo de alquiler de $ 1 por día en un modelo de suscripción de pago por uso, los usuarios pueden aumentar sus ingresos al poder vender más alimentos frescos.
Un emprendedor por el momento
Una vez que fue locutor de radio agrícola, Ikegwuonu creció en una granja y comprendió que el deterioro de los alimentos era un impedimento importante para los medios de vida de los agricultores.
Los refrigeradores ColdHub puede extender la vida de frutas y verduras de dos a 21 días. Esto aumenta las ganancias de los proveedores y agricultores en un 25% en promedio, dice la compañía. También aumenta la energía empresarial entre los usuarios, ya que los días literales de su vida se liberan de tener que dedicar tiempo a comprar, abastecerse, enviar o tirar productos adicionales.
Ikegwuonu ganó el premio 2020 Waislitz Global Citizen Disruptor Award y su premio en efectivo de $ 50.000, que dice que usará “para construir dos ColdHubs en dos mercados de frutas y verduras, salvando 3285 toneladas de alimentos de su deterioro al año, aumentar los ingresos de 200 usuarios y crear cuatro nuevos empleos para mujeres”.
Y hay más dinero en la ecuación.
Ikegwuonu dijo a Global Citizen, “Abordar el deterioro de los alimentos es importante porque, según el Instituto Internacional de Investigación sobre Políticas Alimentarias (IFPRI), se estima que una reducción del 10% en la pérdida mundial de alimentos resultará en una disminución del 11% en el hambre y Disminución del 4% en la desnutrición infantil en todo el mundo”.
“En Nigeria, una reducción del 35% en la pérdida de tomate poscosecha por sí sola [afectaría] la deficiencia de vitamina A en hasta 1,1 millones de niños por día”, agregó.
Es un caso económico clásico de “lo que se ve y lo que no se ve”. Y es posible que Ikegwuonu, Nigeria e incluso el mundo nunca comprendan cuántos avances empresariales, educativos o económicos podrían surgir de la presencia de ColdHubs en el país.
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– Traducido al español por Aletheia Jurado